Cómo ahorrar gasolina conduciendo

El consumo medio de gasolina de un vehículo tiene mucho que ver con el motor y el combustible que se utiliza. Sin embargo, con nuestra propia conducción también podemos conseguir un ahorro considerable.

Una correcta gestión del aire acondicionado y la calefacción

Dos de los elementos que mayor consumo de gasolina generan durante la conducción son el aire acondicionado y la calefacción.

Para accionarse necesitan más energía del motor y este la obtiene directamente del consumo de la gasolina.

Por ese motivo, es recomendable usarlos solo en caso necesario y siempre intentar no hacerlo nada más encender el coche. Ambos sistemas requieren un tiempo de encendido para un correcto funcionamiento. Accionarlos en cuanto arrancamos el coche solo nos ayudará a desperdiciar más energía.

Como alternativa, bajar las ventanillas cuando hace calor mientras conduces no siempre es una buena solución. De hecho, esto afectará a la aerodinámica del coche, que necesitará más energía para moverse a la misma velocidad. Por tanto, gastará más gasolina.

La conducción eficiente reduce el gasto en gasolina

Una conducción prudente, con una distancia de seguridad óptima, sin frenazos ni acelerones, no solo es más segura, sino que también ayuda a ahorrar en gasolina conduciendo.

Esto se debe a que una conducción brusca y descompasada, gasta más energía y, por tanto, combustible.

De hecho, es preferible siempre que se pueda mantener una velocidad uniforme y con la marcha correcta y cambios en las revoluciones óptimas, para reducir el consumo de combustible.

Para el motor en paradas largas

Gracias a los sistemas Stop & Go este consejo es cada vez menos necesario, porque los vehículos lo accionan por sí solos.

No obstante, si tu coche no cuenta con él, recuerda apagar el motor sobre todo si vas a estar mucho tiempo parado. Esta sencilla acción, te permite disfrutar de un ahorro importante, ya que el motor a ralentí consume bastante.

Cuida los neumáticos

Además de un mantenimiento rutinario, debes comprobar la presión de los neumáticos siempre que puedas.

Si conduces un coche con unos neumáticos con una presión demasiado baja, puedes llegar a consumir hasta un 4% más de combustible.

Aligera el coche todo lo posible

El coche requiere de energía para poder mover todo su peso. Sobre todo cuando vayas de viaje, la carga que utilices debes optimizarla todo lo posible.

Reduce el peso que transporta el coche y necesitarás menos gasolina para recorrer el mismo trayecto. Ten en cuenta que el consumo de combustible aumenta un 5% por cada 100 Kg. de peso adicionales.

Reduce el recorrido con una buena planificación

Puede parecer obvio, pero a menos kilómetros, menos gasto de gasolina. Por tanto, si vas a un destino que no conoces, planifica antes tu viaje.

Revisa dónde se encuentra el punto de llegada y qué opciones de circulación son las más recomendables. Evitarás perderte, desperdiciar tiempo buscando el camino correcto y, además, consumirás menos gasolina.